Si comer ciertos alimentos, como comidas y bebidas frías o calientes, te hace sentir incómodo, lo más probable es que estés sufriendo de hiperestesia o, más simplemente, de una mayor sensibilidad de los dientes.
Los ataques de dolor también pueden provocarse por actividades bastante comunes, como cepillarse los dientes o inhalar aire frío por la boca. Este problema es bastante común, así que averigüemos cómo se puede reducir la sensibilidad y deshacerse por fin de estas molestias.
¿Por qué se produce la hipersensibilidad dental?
Una de las razones principales es el desgaste del esmalte dental, que protege los tejidos internos del diente de las influencias externas, incluidas las temperaturas extremas.
La base del diente, la dentina, contiene túbulos microscópicos que conducen al nervio. Y si el esmalte se borra o adelgaza, se abre el acceso a los túbulos dentinarios y las terminaciones nerviosas.
Luego, el diente comienza a reaccionar al estímulo: frío o caliente, ácido o dulce. Particularmente afectados son aquellos que por naturaleza tienen un esmalte dental demasiado delgado, pero al mismo tiempo túbulos dentinarios anchos.
Causas de la sensibilidad dental
-
Cepillado excesivo o frecuente de los dientes
Los cepillos de dientes demasiado duros pueden exacerbar el problema. Recuerda que todo es bueno con moderación: no hace falta cepillarse los dientes más de tres veces al día ni abusar de la higiene bucodental profesional.
-
Recesión de las encías causada por la enfermedad periodontal
Si la encía retrocede, queda expuesta la raíz del diente, que no tiene esmalte protector y será muy sensible a los cambios de temperatura.
-
Bruxismo
Es simple: si se tiene la mala costumbre de rechinar los dientes, con el tiempo el esmalte se desgasta, lo que conducirá a la exposición de la dentina.
-
Enfermedades de los sistemas nervioso y endocrino
Si no existen causas externas, consulta con un endocrinólogo y un neurólogo, es posible que tengas problemas de salud que lleven a un adelgazamiento del esmalte.
-
Problemas hormonales, embarazo y menopausia
Un cambio en el fondo hormonal puede conducir a un mal funcionamiento del metabolismo mineral, lo que afectará negativamente la calidad del esmalte.
¿Cómo evitar las molestias de la sensibilidad dental alta?
Trata de usar un cepillo de dientes suave, no uses demasiada presión al cepillarte y elige una pasta de dientes especial para dientes sensibles.
Procura cepillarte los dientes con movimientos verticales, desde la encía hasta el borde, ya que si te cepillas los dientes en forma horizontal, el esmalte se borra más rápido.
Evita el consumo excesivo de alimentos agridulces, no comas ni bebas alimentos calientes inmediatamente después del frío, y viceversa.
No olvides cuidar bien tus dientes, trata la caries y la enfermedad de las encías a tiempo si ocurren, y asegúrate de informarle a tu dentista sobre el problema de la hipersensibilidad: ellos seleccionarán el tratamiento adecuado.
Maneras de tratar la hipersensibilidad dental
En primer lugar, es importante fortalecer el esmalte para que cumpla al máximo sus funciones protectoras.
Para ello, recomendamos someterse a un procedimiento de terapia remineralizante y fluoración preventiva profunda, que puede fortalecer el esmalte hasta 10 veces. Además, la fluoración ayudará a reducir la probabilidad de caries y enriquecerá el esmalte con elementos útiles.
Si el motivo de la hipersensibilidad de los dientes es el bruxismo, puedes pedirle a tu dentista que recoja un protector bucal especial para evitar el rechinamiento de los dientes por la noche.
Recuerda tener cuidado con el blanqueamiento, ya que este procedimiento puede aumentar la sensibilidad de los dientes. Asegúrate de consultar con tu médico antes de realizar este procedimiento, para reducir el riesgo y futuras molestias.
En Roig Espona nos gusta cuidar de tu sonrisa e informarte sobre temas preventivos. ¡Visítanos!