El simple gesto de respirar por la boca, por inofensivo que parezca, puede acarrear múltiples problemas dentales que a continuación te explicaremos.
De manera instintiva, desde que nacemos, respiramos por la nariz y expulsamos el aire por la boca. Se trata de un aprendizaje innato que realizamos como acto natural y automático, es decir, de manera inconsciente.
Según el estudio reciente de los investigadores de una prestigiosa universidad neozelandesa, llamada Universidad de Otago, determinó que todas aquellas personas que poseen una respiración bucal tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades bucales.
La conclusión de este estudio publicado en el Journal of Oral Rehabilitation, realizado basándose en el análisis del pH presente en la saliva de los participantes. Del cual se obtuvo que las personas con respiración bucal su pH medio era del 6,6; En cambio, las personas con respiración nasal poseían de media un pH de 7.
Enfermedades provocadas por la respiración oral
Caries, mal aliento y problemas periodontales
Al tener una respiración bucal, nuestros tejidos bucales se resecan provocando la disminución de producción de saliva, cuya función es mantenerlos hidratados y proteger nuestros dientes de las caries, el mal aliento, múltiples problemas en nuestras encías y alguna que otra visita al odontólogo para someterse a restauraciones dentales.
Apiñamiento dental
Una vez más este tipo de respiración contribuye a que nuestros maxilares y nuestra nariz no se desarrolle de manera natural, lo cual provoca que el paladar y las arcadas dentarias sean más estrechas, provocando el temido apiñamiento dental.
Desimetría labial y sequedad
Al respirar por la boca es necesario mantener esta un poco abierta, lo suficiente para poder inhalar aire sin dificultad. Mantener la boca en esta posición de forma permanente, trae consecuencias poco agradables como puede ser la deformación del labio inferior, o la sequedad continuada de los labios, formando grietas a causa de la falta de hidratación.
Problemas en la masticación
Como resultado del apiñamiento dental, se generan problemas de maloclusión con lo que repercute de manera directa en la masticación. Una práctica que de no ser tratada a tiempo generará problema de sobrecarga muscular en nuestra boca, además de múltiples problemas digestivos.
Estos son tan solo algunos de los múltiples problemas que puede acarrear una respiración bucal, así que si observas que posees alguno de estos sientomos te aconsejamos que pidas cita lo antes posible en Dentes, tu clínica dental en barcelona de confianza.